El padre de Eros fue Ingenio, o Astucia, su madre Pobreza, o Necesidad. Eros salió a ellos, está en constante necesidad, y se las ingenia incesantemente para satisfacerla.
Eros, es el hijo de Poros (Astucia), y Penia (Necesidad), haci pues Eros (el amor, o atracción) nace cuando se mezclan la astucia y la necesidad.
Cuando una persona se siente sola, deprimida, o aburrida, es el momento justo para atacar. Si infringimos una herida (con astucia), crearemos una necesidad, esto hará que el/lla se sienta atraid@ hacia nosotros, no se trata de disparar a quemarropa, se trata solo de infringir un poco de daño. La representación simbólica de este elemento, son las flechas que lanza Eros a sus victimas.
En la tradición romana su equivalente es Cupido. Dicho de otra manera, nosotros tenemos una necesidad, al infringir la herida en otra persona, ella también sentirá necesidad, hagamosle ver la monotonía en la cual esta inmersa su vida, y abriremos una brecha que nos permitirá llegar a su interior y podremos conquistarla.
Si lo analizamos, los antiguos mitos griegos, nos aportan (en forma de analogías) una visión muy profunda de distintas condiciones humanas. En el mito de Eros y Psique, por ejemplo, vemos como la mente se nubla al estar sometida al influjo del amor (Eros-Penia), estamos dispuestos a hacer cualquier cosa, incluso aquellas que caen en la exagerada falta de lógica, no pensamos correctamente, nos sentimos abrumados, queremos saber del otro, queremos que piense en nosotros, y solo pensamos en estar con esa persona.
Pero eso no es todo, una vez hecha la herida debemos agregar más dosis de astucia y necesidad, debemos ocupar la mente del otro.
Amor y sexo son parte de una misma necesidad, no están separados, el sexo de hecho es una expresión de amor, pues queremos y necesitamos vincularnos, sentir al otro cerca de nosotros, su calor, su afecto, la unión coital crea en el hombre, la sensación de retornar a su origen, y para la mujer la de ser llenada en todo su ser, (como si la unión la completara), lo que ocurre es que en nuestra sociedad, se idealiza al amor como algo etéreo y se limita al sexo como una pasión primitiva o un acto meramente físico.
Si lo analizamos, los antiguos mitos griegos, nos aportan (en forma de analogías) una visión muy profunda de distintas condiciones humanas. En el mito de Eros y Psique, por ejemplo, vemos como la mente se nubla al estar sometida al influjo del amor (Eros-Penia), estamos dispuestos a hacer cualquier cosa, incluso aquellas que caen en la exagerada falta de lógica, no pensamos correctamente, nos sentimos abrumados, queremos saber del otro, queremos que piense en nosotros, y solo pensamos en estar con esa persona.
Pero eso no es todo, una vez hecha la herida debemos agregar más dosis de astucia y necesidad, debemos ocupar la mente del otro.
Amor y sexo son parte de una misma necesidad, no están separados, el sexo de hecho es una expresión de amor, pues queremos y necesitamos vincularnos, sentir al otro cerca de nosotros, su calor, su afecto, la unión coital crea en el hombre, la sensación de retornar a su origen, y para la mujer la de ser llenada en todo su ser, (como si la unión la completara), lo que ocurre es que en nuestra sociedad, se idealiza al amor como algo etéreo y se limita al sexo como una pasión primitiva o un acto meramente físico.
Alexander Lowen, en su libro Amor y Orgasmo nos habla de este tema, pero no profundizare en lo que dice su libro, porque para empezar tendría que hacer referencia a información que requiere más de una pagina, y porque esta no es la línea que pretendo seguir en este momento.
Si complacemos, si somos serviciales, demostramos nuestro interés en el/a otr@, su reacción puede ser la de sentirse alagad@, pero esta impresión durará solo un poco, o bien puede salir huyendo, los humanos somos de lo más raros (ja) puede gustarnos alguien y cuando por fin nos habla nos comportamos de forma realmente idiota, bien esto se da más cuando un hombre inicia la interacción con una mujer y tiene un porque, si la persona se da cuenta de nuestro interés, podrá activar un escudo, en forma de, un mal gesto, una mirada despreciativa, un comentarío grosero, etc. Esto se debe a que ella no quiere ser vista como una chica "fácil" de ligar o bien esta cualificando al hombre, lo que significa que lo esta poniendo a prueba.
Pero recuerda, ninguna persona es totalmente feliz, aún la mujer más bella posee inseguridades, de hecho yo he conocido chicas que no tienen nada de auto-estima, pero que resplandecen por su físico, y hasta llegan a proyectar mucha seguridad, bien, si eres hábil sabrás infringir esa herida, no serás ese hombre totalmente amable o servicial, porque al final eso aburre, cuando ya tenemos a la persona en el bolsillo nos deja de interesar, porque no representa ningún reto para nosotros. Esta es una de las razones por las cuales se es infiel, sobre todo en las mujeres, saberse segura de que tiene a un hombre que hace todo lo que ella quiere o pide, puede llenar su ego, pero inevitablemente lanzara sus miradas al rededor, y en su campo visual puede aparecer otro hombre que no acepta sus caprichos, porque necesitamos limites, sin ellos nuestra vida seria aún más monótona pues haríamos lo que más nos plazca sin tener que reparar en repercusiones.
Si queremos seducir, debemos ser astutos como zorros, si queremos ganar la simpatía de otros no podemos ser simples ovejas, debemos ser listos sin dejar pasar las oportunidades que se nos presentan, ser como Cupidos alados, inocentes, amables y de repente ¡zas! lanzar nuestro veneno, para ocupar la mente del otro y ganar su afecto, su corazón, o su amor, en cualquiera de sus expresiones.
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